Vivir el verano en Andalucía

Andalucía vive durante el verano una explosión de luz y color. Con el buen tiempo y las inmejorables temperaturas los días se alargan, permitiendo realizar todo tipo de actividades al aire libre.

En verano la práctica de deportes, la playa o comer en las terrazas y chiringuitos  son actividades que se multiplican por toda la costa. Las noches se convierten en momento de relax y diversión; fiestas y ferias que se prolongan hasta la madrugada, visitas a espacios culturales que extienden sus horarios más allá de la medianoche, conciertos y actividades diseñados para esta época del año...


Al arrullo de las aguas atlánticas y mediterráneas, los visitantes disfrutan de rutas que inspiran el alma, noches de flamenco y duende y paisajes sobrecogedores. En verano los planes se multiplican por mil y los turistas viajan rumbo al sur.





Para ayudarte a descubrir tantos encantos, te proponemos algunas sugerencias para que este verano sea inolvidable. Playas, monumentos, naturaleza, flamenco… Hay tanto por conocer en Andalucía que puede resultar difícil saber por dónde empezar. 

La calidad de las playas andaluzas es indiscutible y conocida en cualquier lugar del mundo. Con más de 3.000 horas de sol al año, el litoral andaluz encierra playas espectaculares con impresionantes paisajes, que abarcan desde grandiosos acantilados, a marismas llenas de vida y playas todavía vírgenes están esperando a ser descubiertas. Por citar solo una de ellas, Matalascañas, 

Comenzaremos recorriendo las rutas más famosas, que nos muestran el inmenso legado heredado de una Historia milenaria: la Alhambra de Granada, la Mezquita de Córdoba o la Giralda, el casco histórico de ciudades milenarias como Carmona o Ronda. Todas excursiones que nos dejarán sin aliento con edificios, castillos y fortalezas que completan un patrimonio de enorme trascendencia.

Por otro lado, también podemos disfrutar descubriendo nuevos lugares y productos propios de nuestra tierra. Las bodegas donde se cura el mejor Jerez, paisajes inéditos de aguas cristalinas y dunas de arena blanca en Doñana, o la belleza del toro bravo en las ganaderías de Medina Sidonia. 

Sin olvidarnos, por supuesto de descubrir nuevos lugares o practicar shopping en los sitios más exclusivos.

Tierra en fiestas

El manido tópico de que Andalucía vive en fiestas se aproxima ligeramente a la realidad en los meses de estío. Quizás sean cosas del clima que obliga a echarse a la calle y vivir la noche bajo el estrellado cielo andaluz. 

Desde el florecer de la primavera en los albores del mes de marzo, con el blanco azahar resplandeciente por barrios y callejuelas de pueblos y ciudades, la geografía de la Comunidad celebra sus tradicionales romerías, ferias y fiestas patronales. Cruzado el umbral de sus portadas se produce la explosión del folclore: casetas, sevillanas, caballos, calesas, flamencas, farolillos, rebujo y alegría, mucha alegría.

Si la primavera asistió a las ferias de Sevilla, Cádiz, Jerez, Granada o Córdoba, los meses de verano son el turno para Málaga, Almería y Huelva.
Otra fecha muy señalada en Andalucía es la festividad de la Virgen del Carmen, patrona de los marineros, el 16 de julio. Barriada o pedanía, pueblo o ciudad, los profesionales del mar rinden culto a la imagen que cuida de ellos cuando faenan.

Ocho capitales, diez ciudades de ensueño para que el verano tenga otro sabor...

Fuentes: www.andalucia.org y www.abc.es